Los implantes dentales son dispositivos de titanio que se utilizan como sustitutos de las raíces de los dientes perdidos. Se insertan en el hueso maxilar o mandibular y se fusionan con el hueso para proporcionar una base sólida y estable para los dientes artificiales o las prótesis dentales.
Son una de las mejores opciones para reemplazar dientes perdidos porque ofrecen una solución permanente y natural que se asemeja a los dientes naturales en apariencia, sensación y función. El proceso de colocación puede llevar varios meses e incluye varias etapas, como la evaluación inicial del paciente, la planificación del tratamiento, la cirugía para colocarlo en el hueso, y la colocación de la corona o prótesis dental en la parte superior.
Dentro de los tipos podemos encontrar diferentes tipos: titanio, zirconio, carga inmediata y zigomáticos.
Son los más comunes y están hechos de titanio, un material biocompatible que se fusiona con el hueso de la mandíbula. Estos suelen ser de forma cilíndrica o cónica y pueden tener diferentes tamaños y longitudes para adaptarse a diferentes necesidades.
Son de cerámica y tienen una apariencia más natural que los de titanio. Aunque son menos comunes que los implantes de titanio, son una buena opción para pacientes con alergias o sensibilidades a los metales.
Son implantes que se colocan y cargan con una prótesis dental inmediatamente después de la cirugía. Esto significa que el paciente puede salir del consultorio dental con una sonrisa completamente restaurada en un solo día.
Se colocan en dos etapas. En la primera etapa, se coloca el implante en la mandíbula y se cubre con una tapa protectora. Mientras que en la segunda etapa, se retira la tapa y se coloca la prótesis dental.
Pueden ser una solución permanente y natural para reemplazar uno o más dientes perdidos. La pérdida de un diente puede afectar a la mordida, la pronunciación y la estética de la sonrisa.
Pueden ayudar a mejorar la apariencia de la sonrisa al reemplazar los dientes faltantes o dañados. Además de aportar más autoestima a la persona y ayudar en la mordida durante las comidas.
Son perfectos para aquellos que tienen dentaduras postizas que se deslizan o se mueven con frecuencia, lo que puede causar irritación y dificultades para hablar y comer.
La pérdida de dientes puede causar cambios en la mandíbula y en los dientes restantes. Estos, pueden ayudar a prevenir la pérdida ósea y mantener la salud dental a largo plazo.
En nuestra clínica contamos con profesionales en implantología. Especialistas con gran experiencia que te asesorarán en todo lo que necesitas sobre el tratamiento de implantes dentales. Si quieres mejorar tu sonrisa, ponte en contacto con nosotros sin compromiso. Pide hoy presupuesto sin compromiso para un tratamiento de implantes dentales en Fuengirola.
La mayoría de los pacientes pueden tolerar bien el procedimiento de colocación del implante dental y pueden volver a sus actividades normales poco después de la cirugía. Sin embargo, como con cualquier procedimiento médico, existen riesgos asociados, como infección, dolor, inflamación y sangrado. Por lo tanto, es importante hablar con tu dentista sobre los riesgos y beneficios de los implantes dentales antes de tomar una decisión sobre tu tratamiento.
El rechazo de los implantes dentales es una complicación poco común, pero puede ocurrir en algunos pacientes. No obstante, como hemos dicho anteriormente esto es poco común aunque puede ocurrir en el caso de que el tratamiento se haya hecho de manera errónea, por una mala calidad del implante o porque el hueso no esté en buen estado entre otros.
Hoy en día existen muchas soluciones para las personas que no tienen mucho hueso. No tener demasiado no sería un problema ya que pueden aplicar diversos tratamientos para poder colocar el diente. Lo que se debe hacer es ponerte en manos de profesionales y ellos te dirán cuál es la solución correcta.
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